El calcio, presente en el agua como el magnesio, goza de gran importancia para nuestro bienestar físico y nuestra salud. Al igual que los demás minerales, oligoelementos y vitaminas son importantes para nuestro cuerpo, también absorbemos calcio y magnesio a través del agua o a través de una dieta equilibrada de frutas, verduras, pescado, carne y productos lácteos en cantidades adecuadas.
Por un lado, el calcio y el magnesio son buenos para el cuerpo, pero, por otro lado, pueden ser extremadamente molestos e, incluso, problemáticos para la tecnología del hogar. Al fin y al cabo, el agua deposita cierta cantidad de cal por donde pasa, gotea o se encuentra.
Por lo tanto, es esencial encontrar o lograr el equilibrio mineral adecuado en el agua para que el agua contenga suficientes minerales para nosotros. Pero tampoco demasiados para que lo que entra en contacto con el agua de la casa no desaparezca bajo una capa de cal gris. Lo cierto es que la mayoría de los hogares en Alemania tienen agua del grifo media a muy dura o, en otras palabras, demasiada cal en el agua.
Por ello, hemos recopilado los datos más importantes sobre la cal, que deberían mostrarte cómo obtener el equilibrio adecuado y, por lo tanto, la mejor agua para tu hogar:
1. La cal es una sustancia natural
Desde un punto de vista puramente científico, lo que denominamos coloquialmente cal es el compuesto químico carbonato de calcio. Dicho compuesto consta de los elementos calcio, carbono y oxígeno. Su fórmula química es CaCO3. La cal aparece como en la naturaleza, por ejemplo, en el agua.
2. El cuerpo necesita calcio
La cal en el agua no es mala en sí misma. Más bien al contrario, la Organización Mundial de la Salud (OMS) señala la importancia del calcio y el magnesio en el agua para la salud1. Por ello, ¡beber agua es sano!
*1Fuente: WHO, Guidelines for Drinking Water Quality, 4.ª edición, Genf 2011
3. El agua dura genera depósitos de cal
Cuanto más dura es el agua y, por tanto, más cal hay en el agua, los depósitos de cal pueden crearse con mayor facilidad. Hablando de hechos sólidos: la dureza del agua constituye la suma de los iones de calcio y magnesio disueltos en el agua y se indica en "grados de dureza alemanes" ("dH"). La dureza se subdivide en cuatro rangos de dureza: desde suave hasta muy dura. Su proveedor de agua local puede indicarte el grado de dureza de tu agua potable o puede realizar una comprobación de la dureza del agua de BWT. Esto te permite comprobar de forma rápida y sencilla si el agua de tu zona es dura o blanda. Simplemente haz clic en comprobación de la dureza del agua, introduce el código postal y consulta el resultado.
4. Los depósitos de cal prefieren el calor
La cal se convierte en un problema, especialmente cuando el agua se calienta, vaporiza o remolina. porque el calor favorece la deposición de cal.
5. Adiós a la cal gracias a BWT
BWT desarrolla tecnologías para el tratamiento del agua en todas las áreas de la vida. También instalaciones y sistemas que generan agua con equilibrio mineral a partir de agua con mucha cal. Por ejemplo, BWT Perla. Todos los sistemas del BWT AQA Perla funcionan según el denominado procedimiento de intercambio de iones. Durante este proceso, los iones de calcio y magnesio se eliminan del agua y se sustituyen por iones de sodio: el agua dura se convierte en agua de gran suavidad de BWT. También los sistemas de protección antical de BWT, que garantizan agua potable rica en minerales con una óptima protección eficiente contra la corrosión y la cal. Hasta las jarras filtrantes de BWT, que convierten el agua potable, el café y el té en una experiencia única sin cal gracias a los cartuchos de filtrado de agua mineralizada con magnesio.
6. Protección antical
Como se ha dicho, el calcio está bien en ciertas ocasiones, pero a veces se debe recurrir a medios más duros para deshacerse de la molesta cal. ¿Por qué? Muy sencillo: porque el agua blanda protege las tuberías, las calderas y los calentadores de agua de toda la casa. Incluso electrodomésticos como las lavadoras, los hervidores de agua y las cafeteras duran más sin cal. Otra ventaja, si le dices adiós a la cal en casa: Si lavas, te duchas o limpias con agua blanda, necesitas menos detergentes y productos de limpieza y, además, también ahorras una buena cantidad de energía. No solo es bueno para el medioambiente, sino también para la economía familiar.